Cuando me plantearon la posibilidad de que Mercedes hiciera un proceso de coaching grupal mi primer sentimiento fue de temor, pero no pude negarme porque con toda probabilidad nos ayudarían a mejorar la dinámica de las mismas.Me pareció una oportunidad de mejora por lo que accedí a la petición.
En las posteriores reuniones la participación fue haciéndose más activa, aportando herramientas y consejos para que nuestras reuniones tuvieran más orden, método, rigor horario, etc… Una experiencia muy positiva y gratificante que va a ayudar a que nuestras reuniones sean mejores.